sábado, 30 de noviembre de 2013

Negociación salarial: Los números de los involucrados en las paritarias 2014


Por Jorge Duarte* @ludistas

Con la llegada de diciembre se avecinan las negociaciones en el marco de las paritarias 2014. La instancia de negociación colectiva implica directamente a 6,5 millones de trabajadores conveniados e indirectamente impacta en el resto de los asalariados y cuentapropistas que corren detrás de la tendencia general acordada.

Como cada año desde el retorno de la negociación colectiva, diciembre se convierte en el mes que abre las mesas de negociaciones entre gremios y empresarios con el fin de acordar, principalmente, las pautas salariales para el período que inicia. El último mes del año se erige, entonces, como la apertura del juego que permite comenzar a ver las cartas que pondrán en la mesa ambos sectores.
Si bien en las paritarias también se debaten, en algunos sectores, condiciones laborales, temas vinculados a capacitación y otros, la relevancia que obtienen, y el interés que suscitan, parte de las disputas por recomponer salarios erosionados tras 12 meses de inflación. Entre lo que se tenía, lo que se perdió y lo que se pueda arañar por sobre los aumentos de precios, pendulan las negociaciones entre gremios y empresarios.
El mercado laboral argentino, con características únicas en la región, presenta un muy importante número de trabajadores conveniados sobre el total de los registrados. La realidad que posibilita que los acuerdos sectoriales se apliquen sobre la totalidad de los conveniados del sector (más allá de su afiliación sindical o no) es la que determina que millones dependan de negociaciones centralizadas por rama de actividad para conocer el futuro de su situación salarial. 
En Argentina el total de asalariados registrados alcanzan los 8 millones 150 mil personas. Según los números presentados por el politólogo Sebastián Etchemendy "la negociación colectiva cubre al 80% de los trabajadores registrados". Es decir, de lo que se acuerde en las paritarias dependen, directamente, los salarios de 6 millones 500 mil trabajadores.

Cuadro 1: Cantidad de trabajadores alcanzados por convenios colectivos de trabajo sobre el total de los registrados
Fuente: Elaboración propia en base a datos de la EPH INDEC 4° trimestre 2012 y  Etchemendy, Sebastián “El retorno de un gigante”.

Detrás de la tendencia marcada por la negociación colectiva formal suelen moverse también, aunque de forma más dispersa, los ingresos de los 4 millones 300 mil trabajadores asalariados no registrados. De esta manera, las paritarias 2014 que alcanzarán directamente al 50% de los asalariados serán las que determinen los ingresos del universo de los trabajadores. Aunque entre los trabajadores no registrados la dinámica es distinta.

Cuadro 2: Asalariados conveniados sobre el universo de los asalariados
Fuente: Elaboración propia en base a datos de la EPH INDEC 4° trimestre 2012 y  Etchemendy, Sebastián “El retorno de un gigante”.

También buena parte de los 3 millones 50 mil cuentapropistas del mercado laboral argentino, muchos de ellos trabajadores asalariados encubiertos detrás de diferentes figuras que esconden situaciones de fraude laboral, ven mover sus ingresos anualmente de acuerdo a la tendencia de negociación colectiva formal. Este conjunto, obviamente, posará su mirada en las negociaciones para poder preveer su futuro.
Entonces, con las reuniones que iniciarán en los próximos días bancarios, docentes y aceiteros se comenzará a delinear el futuro del poder adquisitivo de los trabajadores del sector pero contarán con la atención y la expectativa de millones. Veremos si la ronda de verano de paritarias marca una tendencia o habrá que esperar entrado el 2014 para poder empezar a sacar conclusiones y previsiones.

*Periodista especializado en temas gremiales

jueves, 28 de noviembre de 2013

Call Centers: Trabajo no regulado


Por Jorge Duarte @ludistas

Luego de haber obtenido dictamen favorable de las comisiones de Legislación del Trabajo y de Comunicaciones e Informática, el proyecto que regula el trabajo en Call Centers no fue tratado en Diputados. El estatuto para el sector seguirá demorado por lo que continuarán sin protección los 60 mil trabajadores de atención telefónica.

Luego de años de expectativa se esperaba que el miércoles se tratase en diputados el proyecto que regula las condiciones de trabajo en los Centros de Atención Telefónica (Call Centers). En una extensa sesión, en la que se negoció hasta la madrugada el temario que sería abordado, no se incluyó la propuesta. De no mediar milagro que logre que se trate la semana próxima, el proyecto deberá volver a las comisiones (por el recambio legislativo) para conseguir nuevamente los dictámenes favorables y esperar a ser legislado en el transcurso de 2014. Así, el oficialismo y la oposición mantienen la deuda con esta porción importante del mercado laboral.

El proyecto que busca poner límites a la flexibilización laboral en los Centros de Atención Telefónica estipula la semana de trabajo de 5 días con jornadas que no podrán superar las 6 horas, mientras que por la noche no podrán superar las 5 horas con 30 minutos. Además, determina descansos de 15 minutos cada 2 horas trabajadas, incorpora 20 días anuales por motivos de estudio y obliga a las empresas a respetar condiciones de seguridad ambientales.

La demora en el tratamiento (y la falta de iniciativa) posibilita que las empresas del sector, que captan una gran cantidad de jóvenes que se insertan al mercado laboral, aprovechen el vacío legal y flexibilicen las tareas y los tiempos productivos. Los aproximadamente 60 mil trabajadores de atención telefónica se enfrentan a una realidad de precarización, alta rotación y falta de protección ante las numerosas enfermedades laborales.
 
Habrá que esperar, al menos, a un nuevo periodo legislativo para que este núcleo importante de precarización de jóvenes tenga límites desde el estado, que hasta el momento ha dejado que la impronta neoliberal permanezca inalterable.

viernes, 22 de noviembre de 2013

Trabajadores de Felfort en conflicto por despidos y fraude laboral


Por Jorge Duarte

Los trabajadores de la fábrica de chocolates Felfort denuncian 14 despidos en los últimos días, con lo que alcanzan más de 50 en el año, fraude laboral y problemas vinculados a la seguridad del personal. Con fallos judiciales a favor buscarán el miércoles 27 tener una respuesta favorable cuando se aborde el tema en el Ministerio de Trabajo.

En los últimos días un total de 14 trabajadores fueron despedidos de la fábrica de chocolates Felfort. El personal  que recibió la noticia engrosa el abultado número que la chocolatera ostenta a lo largo del año. Rodolfo Vidal, delegado de la planta, explica que los despedidos se encontraban precarizados a través de contratos temporarios y que la empresa sistemáticamente cubre puestos fijos con personal eventual incurriendo en fraude laboral. Vidal expresó “Empezamos el año con 250 trabajadores contratados sobre un total de 750 empleados”. Esta situación, que ha sido denunciada en numerosas oportunidades y en diversos ámbitos, ya cuenta con un fallo judicial favorable de la jueza Regina Cañal de la Sala 3 de Apelaciones que determinó que la fábrica Felfort no presenta puestos de trabajos eventuales.

Para intentar revertir la decisión empresaria y abordar temas pendientes como el fraude laboral, el retraso en recategorízaciones y distintos temas de seguridad laboral ya hay pactada una audiencia en el Ministerio de Trabajo para el miércoles 27 a las 14hs. En esa oportunidad los trabajadores plantearán que la empresa debe cumplir el fallo judicial que insta a la empresa a “blanquear” a la totalidad del personal de la planta y cumplir con las obligaciones de seguridad como desoldar las puertas de emergencia que se encuentran clausuradas, implementar instructivos de evacuación y realizar los dos simulacros de incendio obligatorios anuales.

viernes, 15 de noviembre de 2013

Ausencia de representación, ausencia de derechos


Por Jorge Duarte*

Sólo el 14,2% de las empresas argentinas posee representación gremial en sus establecimientos. La ausencia de organización de base, que redunda en menor afiliación sindical, atenta contra la capacidad de los sindicatos de combatir fenómenos como la precarización, las tercerizaciones y la informalidad.

Argentina es el país de la región con mayor tradición de organización sindical. Esta historia se refleja en que Argentina es el país que mayor tasa de sindicalización presenta en la región alcanzando el 37,7%. En este marco, las comisiones internas, victoria del modelo sindical argentino que permiten a los trabajadores aunar fuerzas y disputar palmo a palmo con el capital sus derechos en sus establecimientos laborales, son un punto neurálgico.
La investigación “Representación sindical en los lugares de trabajo: un análisis del módulo de relaciones laborales" de David Trajtemberg, Cecilia Senén González, Carla Borroni, Gabriela A. Pontoni,  da cuenta de cómo la presencia de delegados en los lugares de trabajo genera mayor cercanía entre los sindicatos y los trabajadores del sector, lo que deviene en mayor representatividad y, por ende, mayor afiliación.
En las empresas donde hay delegados gremiales, la tasa de afiliación asciende al 49.4%. Por el contrario, en las empresas donde no se encuentran representantes gremiales la tasa de afiliación desciende al 30,3%. Es decir, menor presencia sindical en los lugares de trabajo, menor afiliación y, por consiguiente, menor capacidad de organización.
La misma investigación sostiene que las ramas con mejor comportamiento de afiliación sindical son industria y transporte, lo que coincide con las ramas con mayor presencia de delegados en los establecimientos. La contracara de este fenómeno se vislumbra en la rama de servicios sociales y empresarios y comercio, donde coincide la menor presencia de delegados con la menor afiliación.
La otra variable a tener en cuenta para analizar el fenómeno es el tamaño de los establecimientos.  En las pequeñas empresas (de 10 a 50 empleados) la cantidad que posee delegado apenas alcanza el 11%; en las empresas medianas (de 51 a 200 empleados) llega al 32%; y en las grandes empresas (más de 201 empleados) el 70% posee delegado. Por lo tanto, cuánto más pequeña es la unidad productiva se registran mayores dificultades para organizarse gremialmente.
Fuente: Elaboración propia en base a “Representación sindical en los lugares de trabajo: un análisis del módulo de relaciones laborales" Trajtemberg, González, Borroni y Pontoni

La presencia sindical en los establecimientos privados, si bien tuvo un aumento en el período posconvertibilidad, apenas alcanza al 14,2% de las empresas. Este número que parece bajo, surge de analizar los establecimientos de más de 10 ocupados ya que no se incluyen los más pequeños. Si se pudieran incluir los establecimientos más chicos en la investigación la cifra descendería aún más.
Para potenciar la revitalización sindical que se dio en Argentina con el regreso de las negociaciones colectivas y el aumento de puestos de trabajo, aportar al aumento de la tasa de sindicalización, combatir la informalidad, las tercerizaciones y la precarización es necesario elevar esa cifra. Si bien el poder de policía laboral no corre por cuenta de los gremios, mayor actividad sindical redundará en mayores derechos. Sin embargo, encontramos que esa tarea se hace cada vez más difícil por diversos factores, entre ellos las persecuciones patronales que se potencian en los establecimientos más pequeños y los sindicatos pro empresariales. Una y otra, muchas veces combinadas, atentan contra las organizaciones de base y desarticulan las posibilidades de quienes buscan cambiar sus realidades.
La comunión entre empresarios y sindicalistas empresarios, fue uno de los factores que potenció el fenómeno de las tercerizaciones y negoció diversas normas que precarizaron las leyes laborales. Ambos escollos parecen ser hoy los que hay que sortear para conseguir mayor organización, que vaya de la mano con mayor representatividad, renovación de las cúpulas y mejoras en la calidad del empleo.
Unir las, todavía maltrechas, fuerzas del movimiento obrero organizado que el desempleo y la flexibilización laboral fragmentaron es la principal tarea para los trabajadores argentinos de cara a la segunda década de posconvertibilidad. Más presencia en los lugares de trabajo, atacar las distintas formas de precarización acordes a la nueva realidad productiva y buscar un nuevo paradigma organizativo con mayor representatividad de las bases parece ser el camino.

* Periodista especializado en temas gremiales / @ludistas