martes, 31 de julio de 2012

Dirigentes y burocracia sindical

Informe tuit con datos y precisiones de dirigentes sindicales que se perpetuan y nada tienen que ver con los trabajadores que representan. Colaboracionismo con la última dictadura militar, causas, sociedades con las patronales y cierre a la posibilidad de participación de los trabajadores en los gremios es lo que sigue en las próximas lineas:

Repasemos un poco algunos dirigentes gremiales que tenemos para ver si entendemos lo que pasa en el movimiento obrero organizado

Pignanelli (SMATA) estuvo con ganas de ponerse al frente del grupo antimoyanista. Por ahora no le da. Asumió al fallecer Jose Rodriguez

José Rodriguez estuvo al frente de SMATA 36 años. Estuvo acusado de colaborar con la desaparición de trabajadores de Mercedes Benz

También José Rodriguez de SMATA es uno de los involucrados en la causa denominada "Mafia de los medicamentos"

Gerardo Martinez (UOCRA) también es uno de los involucrados en a desaparición de personas en la última dictadura. Integró el batallón 601

Ramon Baldassini (Correos) está tan involucrado con la desaparición de personas en dictadura que tuvo que declarar en el juicio a las juntas

En el juicio a la junta Baldassini (Correos) dijo haber tenido reuniones con militares pero no recordar charla de trabajadores desaparecidos

2 dirigentes sindicales más que atravesaron la dictadura militar ganando espacio: Barrionuevo (gastronómicos) y Lescano (Luz y Fuerza)

Lescano va a negociar salarios de los trabajadores y sale de la reunión haciendo lobby para que las empresas aumenten tarifas

De esto hablo: Lescano: "La verdad que las eléctricas tienen razón http://lapoliticaonline.com/noticias/val/80950-7/lescano-la-verdad-es-que-las-electricas-tienen-razon.html Los laburantes mientras siguen sin acuerdo firme

Otro que "casualmente" asumió en 1977 (plena dictadura) en su gremio fue José Luis Lingeri de Obras Sanitarias

Las casualidades hicieron que Lingeri (Obras Sanitarias) también haya llegado a una fortuna: autos de carreras, propiedades CABA y Bariloche

El ministerio de trabajo avaló fraudes de las conducciones en aquellos gremios donde hubo posibilidad de presentar una opción. Todo cierra

El Ministerio de Trabajo y las empresas eligen con quién quieren hablar a través de la persecución y el fraude

También fue escandaloso el fraude de Daer en alimentación. Padrones truchos y muchas omisiones. Perdió todas las fabricas grandes y "ganó"

En los últimos 15 años sólo 3 grandes gremios renovaron su Sec General. 2 por fallecimiento y uno por escándalo de corrupción

El único que renovó y no fue por fallecimiento UTA. Palacios se fue cuando lo denunciaron por la compra de un campo millonario en Henderson

Sobre los 21 gremios más importantes de Argentina el promedio de permanencia de los Secretarios Generales en el cargo es de 24,5 años

Lo vieron a Pignanelli? En qué se parece a un mecánico de alguna de las empresas que representa? y Venegas?

Venegas (UATRE) tiene numerosos terrenos y propiedades a su nombre y a nombre de Sonia Pamela Venegas y Jolani Venegas

Veníamos hablando de Venegas (UATRE) el Ministerio de Trabajo hoy dijo que el trabajo informal en el sector llega al 80%

Mientras los laburantes en el campo pasan necesidades y sufren trabajo esclavo, Venegas (UATRE) sigue juntando propiedades

Además Venegas (UATRE) es investigado por los incidentes en el traslado de los restos de Perón a San Vicente y por mafia de medicamentos

Daniel Solano es un trabajador golondrina desaparecido el 5/11/11 por negarse a ser buche de Expofrut y organizarse. UATRE mira otra cosa

Viviani (Peones de taxi) esta al frente del gremio desde 1983. Denunciado por quedarse coon dinero heredado por el gremio en 1983

Además Viviani (Peones de taxi) fue denunciado por estafa a proveedores de la Obra Social del gremio

También Viviani (Peones de taxi) es investigado en la famosa causa que investiga la mafia de los medicamentos

Zanola (Bancarios) desde el 83 al frente del gremio. Estuvo preso por la causa mafia de medicamentos. Denunciado por enriquecimiento ilícito

Armando Cavalieri (Comercio) denunciado por estafa con viviendas en los 70´s. Acusado de colaboracionista con la última dictadura

Cavalieri (Comercio) Menemista en los 90´s. Acusado de enriquecimiento ilícito y procesado por amenazar a un periodista que lo investigaba

Andrés Rodriguez (UPCN) menemista acérrimo. 22 años al frente del gremio. Poseedor de una gran fortuna y dueño de caballos de polo

Rodríguez (UPCN) suele participar del “Concurso Nacional de Aperos de Uso Tradicional”, que se celebra todos los años en la Sociedad Rural

En nada se parece un peón de taxi a Viviani, ni un trabajador de comercio a Cavalieri, ni mucho menos un albañil a Gerardo Martinez

Todos estos datos (que podemos ampliar todo el día) hacen que sea fundamental re-pensar las prácticas sindicales y las leyes que la regulan

De sindicalistas patronales, de complicidad con las empresas y de traición a los intereses de los trabajadores hablamos cuando decimos burocracia

Vía @ludistas

viernes, 27 de julio de 2012

Cae la participación de los trabajadores en la riqueza


Por Jorge Duarte*
Un análisis estructural de la situación de los trabajadores durante los últimos años y una perspectiva de análisis distinta sobre las divisiones al interior del movimiento obrero.

Hay varios motivos que se presentan a la hora de explicar las divisiones en el movimiento obrero organizado en los últimos años. Las razones político partidarias, las relaciones personales, las ambiciones individuales y los modos de conducción agotados, éstos son sólo algunos de ellos. Sin embargo, mayormente no hay explicaciones que releven cuestiones estructurales, económicas y sindicales. Tratemos el tema desde esa perspectiva entonces.
Durante la década menemista, que derivara en la gran crisis del 2001, se produjo una pérdida constante de la participación de los trabajadores en la riqueza producida. Sin embargo, el golpe de gracia a los trabajadores se expresó en la gran pérdida salarial que provocó en los asalariados la devaluación post crisis de 2001. Esto queda expresado en una caída de 7% de la participación de los trabajadores en la riqueza en el lapso de 12 meses. A partir de 2003, con el comienzo del período kirchnerista se abre una etapa de recuperación acompañada de la creación de millones de empleos. Esta etapa de “romance”, coincidió, y no casualmente, con un momento de quietud en las centrales sindicales. Encontramos una CGT encolumnada detrás de la figura de Moyano y una CTA sin fracturas bajo la conducción de De Gennaro (hasta 2006) y de Yasky (de 2006 a 2010).
El siguiente cuadro expresa el nivel de participación de los trabajadores en las riquezas producidas desde 1993 a 2011:
Cuadro Nº1: Participación de los trabajadores en la riqueza producida
Fuente: Revista Apuntes para el Cambio 
Como vemos, la pendiente decreciente se mantiene desde 1993 a 2001 y se produce una caída brusca, fruto de la devaluación en 2002. Desde 2003 comienza el período de recuperación que se mantiene hasta 2009. Vale remarcar que si bien la pendiente es positiva hasta 2009, el valor alcanzado no supera los números iniciales (1993). Ahora bien, desde 2009 a 2011 vemos que en lugar de crecer la participación de los trabajadores, comienza a decrecer. Esa pendiente negativa hace que se pierdan 2,8 puntos porcentuales en dos años, sobre un total de 10 puntos porcentuales recuperados en todo el período.
La caída en la participación en la riqueza de los trabajadores es contemporánea con las crecientes tensiones dentro de las centrales sindicales. En 2010, en el marco de la disputa por la conducción de la CTA que enfrentó a Micheli y a Yasky se produjo una fractura que hasta el día de hoy no ha podido saldarse. El resultado de ese quiebre dejó una CTA de tinte opositor encabezada por Pablo Micheli y una CTA cercana al gobierno nacional encabezada por Hugo Yasky. En 2011 comenzó, además, el proceso de distanciamiento que terminó en el alejamiento definitivo de Hugo Moyano, Secretario General de la CGT del gobierno nacional y la posterior ruptura de la Confederación General del Trabajo (CGT). ¿Es casual que surjan estas divisiones cuando los trabajadores pierden peso en la participación en las ganancias? Repasemos algunos datos más.
En el período que va de 2004 a la actualidad, también se experimentó un aumento exponencial de las negociaciones colectivas de trabajo. Esto se hizo posible a raíz de que en marzo de 2004 se aprobó la ley 25.877, que derogó la denominada “Ley Banelco” de flexibilización laboral y estableció un nuevo marco jurídico para las negociaciones colectivas. Entre 2004 y 2010 encontramos que se produjo un aumento del 585% de la cantidad de negociaciones colectivas acordadas entre los trabajadores (representados por sus gremios) y las patronales:
Cuadro n°2: Cantidad de negociaciones colectivas por año.
Año
Cantidad de negociaciones
2004
348
2005
568
2006
930
2007
1027
2008
1231
2009
1331
2010
2038
2011
1864
Fuente: Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social
A partir de 2011 notamos un retroceso entre los acuerdos firmados con respecto al año anterior. Eso parece expresarse también en 2012, en el que ya podemos percibir problemas para cerrar acuerdos colectivos. Esto puede reconocerse en un informe presentado por SEL-Consultores del mes de junio, que menciona que el 47% de los convenios colectivos del año se negocia con retraso. Estos problemas se vinculan con el aumento de la conflictividad y con el freno de la economía que impone incertidumbre entre las partes.
Por su parte, la conflictividad gremial, que en el país se mantenía en valores bajos y relativamente estables en el período de post convertibilidad, se disparó en 2011. Mientras que en 2010 se relevaron un total de 385 conflictos, encontramos que en 2011 la cifra relevada llegó a un total de 754. De esta manera nos topamos con que el aumento de conflictos entre 2010 y 2011 fue de un 96%. Esa elevación de la conflictividad se mantiene en 2012, en medio de la dispersión de las fuerzas organizadas de los trabajadores causada por las fracturas en las centrales sindicales.
Entonces encontramos que entre 2009 y 2011 cae la participación de los trabajadores en las riquezas, se detiene el ritmo de aumento de la firma de las negociaciones colectivas, aumenta la conflictividad gremial y se produce una dispersión de las fuerzas organizadas de los trabajadores. Estos cuatro factores, combinados con el parate que presentan las variables económicas (retroceso en algunos casos), exhiben un panorama complejo a enfrentar por los trabajadores. Las divisiones en el movimiento obrero parecen expresar un freno a las posibilidades de imponerse en la puja distributiva y aporta al retroceso de la participación de los trabajadores en la riqueza.
En una Argentina en la que hay menos para repartir por la caída en la producción, la fuerza que consigan articular los trabajadores organizados será fundamental para que no continúe su retroceso en la participación en la riqueza producida. Si bien la fragmentación pareciera ser un freno, la respuesta de los asalariados se plasma en el aumento de la conflictividad, demostrando que sigue firme la lucha para recomponer una variable que todavía no ha llegado a los valores de los noventa y que todavía está en el 50% de lo que llegó a ser a mediados de 1970.

* Licenciado en Comunicación Social / Periodista especializado en temas gremiales / Conductor de En Casa Hablamos FM Radio Sur 88.3http://escritosdeclase.blogspot.com.ar/ @ludistas
Nota originalmente publicada en Marcha

martes, 24 de julio de 2012

CGT: ¿Una disputa por la legalidad o por la legitimidad?


Por Jorge Duarte*
Con la realización del Congreso Ordinario de la CGT y la elección de Hugo Moyano como Secretario General de la central por un tercer período, se abre una nueva etapa dentro del movimiento obrero organizado.



La consolidación de la dispersión en varias centrales es un hecho y ahora sólo resta ver las respuestas de los trabajadores ante la fragmentación de sus dirigencias.
Con la división consumada, Moyano comenzó su tercer mandato al frente de la CGT, mientras que Barrionuevo continúa a la cabeza de la CGT Azul y Blanca y Caló espera que llegue el 3 de octubre para que los gremios denominados “Gordos” e “Independientes” lo designen como conductor de “la CGT de los gremios más importantes”. Con tres CGT y, no olvidemos, dos CTA, a los trabajadores se les presenta un escenario de absoluta fragmentación. Mientras que desde el sector de Caló dicen que las diferencias son de modelo de conducción y atacan el personalismo del líder camionero, desde el moyanismo sostienen que las diferencias son programáticas. Por su parte, Barrionuevo coquetea con ambos y no cierra con ninguno.
La pelea por la legalidad de la CGT comenzó hace semanas. Los dirigentes que acordaron una lista de unidad con Antonio Caló (UOM), Carlos West Ocampo (Sanidad); Ricardo Pignanelli (Mecánicos); Julio Ieraci (Luz y Fuerza) y Armando Cavalieri (Comercio) presentaron cartas documento impugnando a la Comisión Directiva que refrendó el cronograma electoral que llevó a Moyano al frente de la CGT. El Ministerio de Trabajo de la Nación, por medio de una resolución, respaldó tal pedido y ordenó al moyanismo que convoque nuevamente a una reunión de Comisión Directiva que establezca un nuevo proceso electoral. Sin embargo, desde los sectores afines al camionero apelaron la decisión ministerial argumentando que el proceso es absolutamente legal y sostienen que la intervención del Ministerio de Trabajo es una cuestión de injerencia política en la vida sindical. Esta lucha seguirá en el Ministerio de Trabajo y en Tribunales con un final casi cantado.
Ahora bien, el tema central que se origina en este momento del conflicto tiene más que ver con la legitimidad que pueda conseguir alguna de las CGT que con la legalidad que establezca una resolución judicial o el Ministerio de Trabajo. Hablamos específicamente a qué conducción va a conseguir el consenso necesario entre los trabajadores para poder erigirse como referente de sus reclamos y reivindicaciones. De esta construcción de consenso y de la capacidad de representación de las demandas de los laburantes, surgirá el poder real que guíe el rumbo de la Confederación General del Trabajo en los próximos cuatro años, en los que la política partidaria no será ajena.
El acto de Ferro dejó una serie de pistas para que podamos pensar lo que se nos viene. Por un lado, se concretó lo que era evidente: la gran mayoría de los gremios se encuentran del lado del conductor camionero, pero los gremios con la mayor cantidad de afiliados elegirán a Caló como conducción el próximo 3 de octubre. Por otro lado, quedó asentada la limitada (y en decadencia) influencia de Barrionuevo y su CGT Azul y Blanca en diáspora. Esto dibuja un escenario de disputa muy parejo entre las dos CGT, con un Barrionuevo que con su neutralidad no suma, sino que por el contrario, resta.
Además, Ferro consolidó a camioneros como el único gremio con capacidad de movilización masiva, dejando al descubierto que el resto de los sindicatos que acompañan a Moyano encuentran muy limitada su capacidad de acción en ese sentido. También dejó constancia de una presente y numerosa columna de la Juventud Sindical.
En el plano superestructural, el Congreso de CGT del 12 de julio expresó una tropa muy cerrada y consolidada del moyanismo, mientras que se plasmaron fracturas en los gremios antimoyanistas que estuvieron presentes como adherentes. Sin embargo, también se expusieron fugas de gremios que hasta último momento se contaban como participantes (la Unión Ferroviaria, por ejemplo). Además, a través de palabras de varios congresales se hicieron visibles las presiones que sufren los distintos gremios para dimitir y pasarse a las filas de Caló, mediante amenazas de no homologar acuerdos paritarios, o no recibir fondos de la Administración de Programas Especiales (APE) para cubrir los gastos de sus obras sociales.
La disputa superestructural está más caliente que nunca, con dirigentes sindicales y políticos jugando fuerte. Sin embargo, será el consenso conseguido en las bases lo que incline la balanza para un sector u otro y establezca el liderazgo del movimiento obrero organizado en el tiempo por venir.

* Licenciado en Comunicación Social / Periodista especializado en temas gremiales / Conductor de En Casa Hablamos FM Radio Sur 88.3http://escritosdeclase.blogspot.com.ar/ @ludistas
Nota originalmente publicada en Marcha

jueves, 19 de julio de 2012

Fondos APE: fortaleza y talón de Aquiles

Desde hace tiempo Hugo Moyano y su tropa afirman que funcionarios del gobierno "están saliendo a comprar dirigentes sindicales con dinero perteneciente a la APE”. Las implicancias de este entramado de dinero, política, gremialistas y poder es lo que queremos entender, en una historia que está teñida por la mafia de los medicamentos.


La Administración de Programas Especiales (APE) es un organismo que vive permanentemente en un tire y afloje entre el gobierno de turno y las Obras Sociales Sindicales. De los pagos que APE transfiere a los agentes de salud dependen las finanzas de las obras sociales y en algunos casos las finanzas de los sindicatos en general.

Según el decreto 1198/12, publicado hoy en el Boletín Oficial, el gobierno decidió que la APE sea "absorbida" por la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS). APE hasta hoy era un organismo descentralizado de la Administración Pública Nacional, en jurisdicción del Ministerio de Salud, con personería jurídica propia y un régimen de autarquía administrativa, económica y financiera. APE se encarga de reintegrar a las Obras Sociales parte de lo que invierte por tratamientos catastróficos, de alta complejidad y baja incidencia entre sus afiliados. Destina  un presupuesto anual de $1.200 millones, por lo que, para los agentes de salud, el dinero que aprueba el organismo es fundamental para su mantenimiento.

Pre-mafia de los medicamentos, los recuperos por tratamientos que financiaba APE se realizaban por subsidios, es decir que APE giraba el dinero a las Obras Sociales, las cuales posteriormente debían demostrar ante el organismo la utilización de esos fondos. Este sistema daba lugar a la presentación de expedientes falsos o prestaciones para las cuales ese dinero no había sido utilizado. Este procedimiento, sumado a la vista gorda de quienes debían controlar, devino en la ya conocida y renombrada causa por la mafia de los medicamentos.

Desde entonces, el recupero se realiza por reintegro, es decir que los agentes de salud pagan el total de la prestación y luego APE determina si es viable o no la aprobación del pago del expediente presentado. De esa manera, las Obras Sociales se encuentran con un obstáculo a la hora de cerrar números, ya que no cuentan con los fondos destinados por el organismo, hasta que este no apruebe los pagos por las prestaciones.

Durante su alianza con el kirchnerismo, Moyano logró ubicar a hombres de su confianza al mando de la APE.  Christian Asorey, yerno del dirigente sindical, fue hasta marzo de este año, gerente de Seguridad y Tecnología Informática del organismo. De esta manera, el líder de camioneros agudizó su interna con otros gremios que no se veían favorecidos con el reparto de reintegros. 

Según declaraciones de la ex-ministra de salud Graciela Ocaña, quien estuviera a cargo de la APE, “Moyano conoce bien el tema porque es lo que pretendía hacer, justamente comprar o manejar arbitrariamente y discrecionalmente esos fondos”. Cabe destacar que durante ese período, se efectuaron controles sobre la entidad como las auditorías realizadas por la Auditoría General Nacional (AGN), que comprometieron al organismo y a muchas obras sociales. De un muestreo de expedientes entre los años 2005 y 2010, se encontraron irregularidades tales como prestaciones a más de un centenar de personas ya fallecidas, supuesta documentación falsa y expedientes firmados por médicos sin registrar.

Actualmente, APE es dirigida por Manuel Alves, hombre del actual ministro de salud Juan Manzur, y la ex-diputada nacional Liliana Korenfeld, quedó a cargo de la Superintendencia de Servicios de Salud, logrando correr de escena a los moyanistas. El decreto publicado hoy refrenda la decisión de correr de escena la influencia de los dirigentes sindicales y plasma un hecho que en la práctica ya ocurría. Nada va a cambiar a partir de hoy en APE, porque el gobierno ya habían hecho los cambios profundos antes: dejaron al moyanismo afuera y también a los antimoyanistas. No quieren cometer el mismo error dos veces. Dejar el manejo del organismo en manos de un gremialismo es potenciar crecimientos y tener menos control sobre sus acciones.

Mientras que la disputa política y gremial entre Moyano y el gobierno nacional crece, APE representa una batalla concreta, pero no menor, por la caja de las obras sociales. El organismo que hasta hace meses era parte de la base de poder de fuego del moyanismo hoy pasó a ser una debilidad y amenaza en convertirse en su talón de Aquiles.

vía @ludistas y @luligaleano85

viernes, 13 de julio de 2012

El neoliberalismo al palo: trabajadores de Call Centers


Por Jorge Duarte*. Análisis de la realidad de los trabajadores de Call Centers. Los centros de atención telefónica son hoy uno de los principales lugares de inserción laboral para los jóvenes.

Mientras se destruían empleos en los sectores productivos y comenzaba a trasladarse una parte de la demanda de trabajo al sector de servicios en los 90, los centros de atención telefónica emergieron como un foco importante de inserción en el mercado laboral. El contexto de furioso neoliberalismo en el que surgen no es casual y la impronta de precarización laboral obtenida como marca de nacimiento todavía rige en la mayoría de los denominados “Call Centers”.
Muchas personas de entre 18 y 35 años es muy probable que hayan tenido alguna experiencia laboral relacionada a un centro de atención telefónica. Estas empresas, que se han convertido en grandes captadoras especialmente de jóvenes, expresan la cara más pura del neoliberalismo: el individualismo extremo. Las competencias a la que son sometidas los trabajadores con sus mismos compañeros son brutales. En muchas ocasiones se trata de vencer en compulsas de ventas o en “productividad” a sus propios compañeros, porque de eso depende parte del salario que perciban a fin de mes.
La gran presión que sufren los trabajadores de Call Centers -que en algunos casos llegan a atender más de 200 llamadas en 6 horas-, los bajos salarios que perciben y el alto nivel de precarización que soportan generan una realidad de circulación permanente. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el trabajador del sector tiene una rotación muy importante, dado que la mayoría del personal no pasa del año de antigüedad en cualquier empresa del rubro. Cabe remarcar que las cifras de permanencia en un puesto varían ampliamente entre la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Salta, Tucumán o Mar Del Plata, siendo que en estas últimas ciudades suelen encontrarse números de estabilidad más prolongados en el puesto, ante la escasa oferta laboral alternativa.
Para comenzar a revertir esta situación de absoluta desprotección, los trabajadores de Call Centers están formando un gremio que represente sus intereses, el Sindicato Único de Trabajadores de Atención Telefónica (SUTAT). Esta rama laboral actualmente no se encuentra cubierta por un convenio colectivo de trabajo que ampare específicamente la labor y ese es uno de los objetivos principales del SUTAT. Esta carencia genera desprotección de los trabajadores y beneficios para las empresas, que aprovechan el vacío legal para flexibilizar las tareas y los tiempos productivos. Esta misma falta de encuadre es la que no resguarda a los trabajadores de distintas enfermedades laborales propias como pueden ser la sordera, la tendinitis en las manos, los dolores de espalda, stress, etcétera.
En Argentina los trabajadores de atención telefónica superan los 70 mil, distribuidos a lo largo del país. El salario que perciben estos 70 mil trabajadores es de $3000, en promedio. Recordemos que el Salario Mínimo Vital y Móvil es de $2300, y que según estimaciones razonables que presentó la Junta Interna de la Asociación de Trabajadores del Estado en el Indec (ATE-Indec) una familia tipo necesita de $ 5.502 por mes para cubrir sus gastos.
El SUTAT ya comenzó los trámites ante el Ministerio de Trabajo para obtener la simple inscripción, paso necesario para consolidarse como órgano de representación y para comenzar a negociar mejoras salariales y de condiciones laborales. Sin embargo, un trámite que debe durar aproximadamente 90 días para chequear que los afiliados sean reales y que el estatuto se ajuste a derecho, lleva 15 meses sin novedades. Esta “demora” del ministerio de Trabajo es atribuida a diversos factores, entre ellos dos muy importantes: por un lado las presiones que ejercen las patronales y el poder de lobby que ostentan para impedir la organización gremial. Por otro lado el gremio de comercio, liderado por Armando Cavalieri, que actualmente tiene bajo su órbita a los trabajadores de Call Centers y ejerce su capacidad de presión para no perder esa importante masa de recursos que generan los 70 mil trabajadores del sector.
El cuadro se completa con patronales que persiguen sistemáticamente a quienes comienzan a organizarse. Esta situación se acentúa en empresas multinacionales ubicadas en provincias del Norte de nuestro país, donde no sólo el trabajador no posee ningún tipo de resguardo sindical, sino que a cualquiera que intente defender sus derechos le espera, inevitablemente, el telegrama de despido. Las metodologías persecutorias van de la mano de un objetivo claro: no permitir la organización de los trabajadores en una asociación sindical que haga contrapeso al poder empresarial y pueda oponerse a la lógica neoliberal imperante.

* Licenciado en Comunicación Social / Periodista especializado en temas gremiales / Conductor de En Casa Hablamos FM Radio Sur 88.3  http://escritosdeclase.blogspot.com.ar/ @ludistas
Nota originalmente publicada en Marcha

viernes, 6 de julio de 2012

La presión tributaria sobre los trabajadores: disputa circunstancial entre Moyano y el gobierno nacional.


Por Jorge Duarte*

Detrás de la contienda entre el sector sindical encabezado por Moyano y el gobierno nacional se traslucen varios conflictos. Por un lado, encontramos la interna sindical que arremete y se llevará por delante la estructura de la Confederación General del Trabajo (CGT). Por otro, nos aventuramos, una vez más, a la interna pejotista que busca cerrar sus candidatos para 2013 y 2015 dentro de un marco de alianzas complejo. Pero además, tenemos que poner en evidencia que se está en la etapa de ajustes al "modelo" -que parece necesitar arreglos para no estallar- y alguien tiene que pagar la diferencia.
Los fríos números de la economía nos indican que estamos frente a momentos en los que se hace imprescindible realizar ajustes al modelo de acumulación kirchnerista (también conocida como "sintonía fina"). El estancamiento mostrado por la producción industrial en los meses de abril y mayo y las proyecciones de crecimiento muy por debajo del sostenido en años anteriores dan muestra de ello. El contexto de crisis internacional y la merma de la demanda de Brasil aportan a un escenario complejo que obliga a tomar decisiones y destruir el fino equilibrio entre diversos sectores que había conseguido anteriormente la administración kirchnerista.
Dentro del Boletín de Estadísticas del Mercado Laboral podemos encontrar expresiones que dan cuenta de cómo el freno en la economía repercute en el mercado laboral. Durante el primer trimestre del 2012, "la tasa de desocupación creció, pasando del 6,7 al 7,1 por ciento". En términos concretos, esto expresa "la destrucción de 328.518 empleos en los últimos tres trimestres". Si le sumamos las suspensiones que se anunciaron en la industria automotriz en lo que va del año (con Renault y Fiat a la cabeza), las suspensiones en la industria metalúrgica y el parate que vive el mercado inmobiliario por las restricciones en la compra de dólares, el futuro se perfila complejo.
Este presente nos pone frente a una situación nunca antes transitada por el kirchnerismo. Ahora bien, podemos buscar algunas pistas de lo que viene en lo ocurrido durante el 2009 en el país. En un contexto de fuerte crisis internacional que golpeaba las puertas, ese año el gobierno nacional, todavía con aire político y en proceso de recuperación de la disputa que sostuvo con los sectores agroindustriales, no actualizó los topes a partir del cual los trabajadores pierden el beneficio de recibir los montos correspondientes por las asignaciones familiares. Ese año tampoco se actualizó el tope a partir del cual se comienza a pagar el impuesto a las ganancias por parte de los asalariados. De este modo, se trasladó parte del costo de la crisis como presión tributaria sobre los trabajadores ocupados formalmente.
No obstante todo ello, no fue Moyano el mayor defensor de los derechos de los trabajadores ese año. Recordemos que acompañó y defendió hasta hace unos meses al gobierno al que hoy critica, entre otras cosas, por no haber terminado con la pobreza. El actual enfrentamiento, en un nuevo contexto de traslado de la presión tributaria hacia los trabajadores, por sobre sectores de la economía concentrados, renta financiera y otros, lo pone a la cabeza de una batalla que circunstancialmente lo encuentra como hombre fuerte. Los ajustes al modelo de acumulación hay que hacerlos con o sin Moyano. La decisión del Gobierno Nacional, por el momento, ha sido la de prescindir del líder camionero como herramienta y hombre que acompañe la toma de decisiones.
El discurso de Moyano lo deja en un lugar expectante. Parece que más allá de las decisiones que se tomen, él quiere estar dentro de quienes las toman. "Los trabajadores estamos dispuestos a poner el hombro", dijo, por si hacía falta aclarar y dar mayor evidencia de que podía desistir de algunas de las banderas de lucha que hoy sostiene. El gobierno nacional, más precisamente Cristina Fernández de Kirchner, hoy piensa que puede erosionar el poder del líder camionero y dejarlo fuera de las decisiones sobre el fututo del proyecto. En su reemplazo elige a interlocutores sindicalistas con limitado poder de movilización y escasa proyección política.
Mientras tanto los trabajadores esperan la suba del mínimo no imponible de ganancias y los topes de asignaciones familiares. La última actualización lleva ya 15 meses y las paritarias de 2012 se empiezan a cobrar haciendo que cada vez más trabajadores deban tributar y pierdan asignaciones familiares. Se estima que la decisión de subir los topes se tomará en el mediano plazo, sin embargo esa demora provoca, por arrastre, aumento de la presión tributaria.
La puja distributiva, con las proyecciones de crecimiento de entre el 2,5 al 4 por ciento las más optimistas, deja menos por disputar. El gobierno nacional parece optar por defender los intereses empresariales que “la levantaron en pala” y la renta financiera. Moyano no parecía estar muy en desacuerdo con esto hasta que dejó de ser tenido en cuenta como interlocutor. Lo que todavía resta por saldarse es si ambos pierden con la disputa o se fortalecen y se multiplican como alternativas de cara al 2013.

* Licenciado en Comunicación Social / Periodista especializado en temas gremiales / Conductor de En Casa Hablamos FM Radio Sur 88.3  http://escritosdeclase.blogspot.com.ar/ @ludistas
Nota originalmente publicada en Marcha